El Partido Comunista Chino: enemigo de la libertad en China y el mundo

INTRODUCCION

La referencia que los ciudadanos libres del mundo tienen sobre China se basa en las crecientes relaciones comerciales que el régimen chino, liderado por el Partido Comunista Chino, sostiene con cientos de países, entre ellos muchos que son capitalistas, y en la producción de bienes y servicios que desde China inundan el mercado mundial desde hace casi 45 años. Sólo estudiosos, activistas de derechos humanos, políticos y diplomáticos interesados en China o personas vinculadas directamente con la vida en el interior de este país conocen y reconocen la cruel realidad que enfrenta el pueblo chino desde que se instauró el comunismo: la falta de un estado de derecho, la represión política, y el desamparo de los ciudadanos frente a un estado totalitario que controla todas las facetas de la vida del país.

El mundo libre hoy se encuentra amenazado por el expansionismo del régimen chino que, incapaz de renunciar a la ideología comunista, ha logrado desarrollar una alianza nefasta con millonarios y corporaciones del mundo libre que aspiran a crear un gobierno globalizado donde unos pocos controlen los hilos del poder económico y político y se borren las identidades nacionales. Mientras esto ocurre, existe una China clandestina, que lucha diariamente por la libertad en las condiciones más desiguales.  Wang Bingzhang, pionero de la lucha por la democracia en China, permanece en prisión desde el 2002 condenado a cadena perpetua, y dijo que el Partido Comunista Chino es y siempre será un régimen opresivo y totalitario que se mantiene en el poder gracias a sus mentiras, así lo afirmó su hijo Times Wang recientemente en Ginebra.

ANTECEDENTES

El jueves 13 de julio de 2017, cuando el gobierno de la ciudad de Shenyang anunció la muerte de Liu Xiaobo, sólo quienes conocían la lucha y sacrificio de este intelectual, poeta y prisionero político chino, se dieron cuenta que había dejado de brillar una luz indispensable. Xiaobo recibió el Premio Nobel de la Paz en el 2010 mientras se encontraba en prisión. El Comité noruego del Nobel afirmó, al conocer la muerte de este defensor de los derechos humanos, que el gobierno chino tenía gran responsabilidad en esa muerte.

La muerte Liu Xiaobo no es un caso aislado, sino que confirma el accionar sistemático del régimen chino contra sus opositores y su pueblo.

El escritor y ex prisionero político chino Dr. Jianli Yang se ha referido a la existencia de dos Chinas. En mayo del 2012, expresó: “Durante los últimos veinte y tres años desde los sucesos de la Plaza Tiannamen, el régimen del Partido Comunista Chino ha establecido dos Chinas, y una de las dos Chinas, la cual llamo “China Inc.”, la cual está formada por el matrimonio de las élites políticas, económicas e intelectuales corruptos que monopolizan el poder, el capital, la cultura, y la información. […] La verdad es que existe otra sociedad llamada China, la China clandestina, una sociedad formada por miles de millones de chinos que son virtualmente trabajadores esclavos y que trabajan para China Inc.”.

La masacre de los jóvenes estudiantes de la Plaza de Tiannamen, ocurrida en junio de 1989, demostró que, a 10 años de la apertura por parte de Estados Unidos de las relaciones comerciales y diplomáticas con el régimen chino, el régimen se había fortalecido para poder aplastar las voces disidentes.

Y más recientemente lo mismo ha ocurrido con Hong Kong, y sus ciudadanos que, habiendo crecido bajo la libertad protectora de Inglaterra, resistieron a través de la lucha cívica no violenta la imposición del totalitarismo chino, pagando un alto precio en represión, cárcel y ostracismo. Este es el caso de Jimmy Lai, del periódico Apple Daily en Hong Kong, quien fue detenido el 10 de agosto del 2020 y permanece en prisión desde entonces en celda de aislamiento.

Mientras el régimen chino destrozaba a la oposición en Hong Kong, el mundo estaba sumido en la pandemia del COVID 19, otro hecho cuyo origen está en un laboratorio de la ciudad de Wuhan y de lo que el régimen chino aún no ha brindado explicación transparente al mundo. Muchos chinos valientes que en los inicios de la pandemia lograron denunciar por las redes sociales la situación en Wuhan y el creciente contagio, están muertos, presos o desaparecidos. El caso de la bloguera Zhang Zhan, que reportaba desde Wuhan entre enero y febrero del 2020  sufrió represalias directas. Zhang Zhan fue excarcelada en mayo del 2024 y tres meses después de su excarcelación fue nuevamente detenida y encarcelada .

VIOLACIONES A LOS DERECHOS FUNDAMENTALES DE LOS CIUADANOS EN CHINA

Doce años después de que Xi Jinping iniciara su mandato en China, la represión ha aumentado, los mecanismos de control a la población se han sofisticado, y las cárceles permanecen llenas de presos de conciencia. La libertad de expresión es uno de los derechos fundamentales que más se reprimen en China. El gobierno chino controla todas las fuentes de información, incluyendo las informaciones digitales.

En el reporte general sobre China publicado por Human Rights Watch a principios de 2025 se afirma: “No hay sociedad civil independiente, no existe libertad de expresión, asociación, reunión o religión, los defensores de derechos humanos y otros percibidos como críticos del gobierno son perseguidos. El gobierno considera que las comunidades de tibetanos y uigures, cultural y étnicamente diferentes, son un peligro y los somete a medidas represivas fuertes. Cientos de miles de uigures permanecen encarcelados como parte de los crímenes contra la humanidad del gobierno chino en la región. El gobierno ha dado al traste con las libertades civiles en Hong Kong. Mientras que gobiernos extranjeros reconocen que el gobierno chino ha empeorado su récord de respeto a los derechos humanos, no se han enfrentado a Pekín.”

La Ley de Secretos de Estado fue modificada y agravada por el régimen chino durante el 2024, y su implementación ha estrechado el margen posible de crítica al sistema, incluyendo temas de economía que antes no eran considerados una afrenta al sistema. De acuerdo al Comité para la Protección de Periodistas, durante el 2024 unos 50 periodistas independientes fueron encarcelados. El 29 de octubre de 2024, fueron condenados el abogado y defensor de los derechos humanos Yu Wensheng a tres años de prisión y su esposa Xu Yan a un año y nueve meses. Después de que la pareja fue detenida en abril del 2023, su hijo de 18 años ha sufrido problemas de salud mental, según Amnistía internacional. Ambos intentaban reunirse con representantes de la Unión Europea que visitaban Pekín. Otros casos son los de la periodista independiente Huang Xueqin juzgada en Hong Kong en junio del 2024 por los supuestos delitos de “incitar la subversión contra el poder del estado”, también el activista laboral Wang Jianbin fue condenado en el mismo juicio a 3 años y medio de prisión.

La libertad religiosa es otro de los derechos gravemente violados en China. Desde 2016, el régimen chino ha impulsado una campaña brutal para que las representaciones religiosas que aún existen en el país sean obligadas a plegarse al Partido Comunista Chino y a su agenda represiva. Eso lo demuestra el caso de Monseñor Thaddeus Ma Daqin, Obispo Católico Auxiliar de Shanghái quien ha permanecido en arresto domiciliario desde 2012 por rechazar su inscripción en la Asociación Patriótica Católica, entidad gubernamental que controla la vida de los católicos en China. 

Por otro lado, una de las comunidades más reprimidas son los uigures, grupo étnico predominantemente musulmán que viven en el noroeste chino en la región autónoma de Xinjiang. En septiembre de 2022, la oficina de la Alta Comisionada del Comisionada del Consejo de Derechos Humanos de la ONU publicó un informe sobre los crímenes que ha cometido y comete el régimen chino contra los uigures, documentando detenciones masivas, campos de concentración e internamiento, trabajo forzado, restricciones a las libertades religiosas y culturales, además de informes creíbles de tortura, esterilización forzada y otras violaciones a sus derechos. La activista uigur Rahima Mahmut brindó su testimonio durante su intervención en la Cumbre de Ginebra el pasado 18 de febrero de 2025.

El 2 de abril del 2025, las autoridades chinas confirmaron la muerte del respetado monje tibetano Tulku Hungkar Dorje, quien en agosto del 2024 había sido declarado “desaparecido” después que el 21 de julio impartiera una conferencia pública. Los reportes independientes indican que Tulku fue reprimido por promover los derechos humanos y la libertad de los tibetanos marginados bajo el régimen chino. La Administración Central Tibetana, con sede en el exilio, afirmó que: “La muerte de conocidas y respetadas figuras religiosas del Tíbet ha sido un patrón seguido por las autoridades chinas con el objetivo de eliminar a los tibetanos que promueven la cultura, el lenguaje y la identidad del Tíbet. La detención, tortura, y asesinato de líderes respetados como Tulku Hungkar Dorje es una estrategia deliberada para silenciar a los que abogan por los derechos fundamentales del pueblo tibetano.” Este no es un caso aislado, entre el 2019  y el 2020, el régimen chino encarceló y condenó a 20 años de prisión al monje Choegyal Wangpo, y de acuerdo a la organización Human Rights Watch, cerca de 20 monjes fueron arrestados en el mismo pueblo de Wangpo, en el condado de Tingri, monasterio de Tengdro, y en el mismo período de tiempo y Lobsang Zoepa, uno de los monjes arrestados, se suicidó en protesta por los arrestos.

Falun Dafa, conocido también como Falun Gong, es una organización religiosa cuyos miembros han sido perseguidos durante décadas. En un informe fechado en marzo de 2025 y publicado por Minghui.org, se afirma que entre enero y febrero de 2025, 518 practicantes de Falung Gong han sido detenidos o reprimidos por profesar su fe.

La libertad de asociación y movimiento es violada sistemáticamente al pueblo chino. El férreo control del Estado sobre los ciudadanos para impedir que se organicen es demostrable en el caso del abogado de derechos humanos Ding Jiaxi y la jurista Xu Zhiyong, detenidos junto a otros colegas en diciembre del 2019. Permanecieron desaparecidos hasta que se confirmó que se encontraban bajo la custodia de las autoridades. El 10 de abril de 2023, Xu Zhiyong y Ding Jiaxi fueron condenados a 14 y 12 años de prisión respectivamente. Ellos dos junto a otros cinco activistas han sufrido detención arbitraria, tortura y juicio sin garantías procesales. Amnistía Internacional realizó un llamado urgente por la libertad inmediata de estos activistas en diciembre del 2024.

Este es un resumen abreviado de algunos casos. Se puede afirmar que el régimen chino viola los derechos humanos del pueblo chino de manera sistemática y deliberada todo el tiempo, a pesar de que ha ratificado numerosos convenios internacionales donde se ha comprometido a respetar los derechos fundamentales de su pueblo.

UN PELIGRO INTERNACIONAL

En el 2021, el Departamento de Estado de los Estados Unidos publicó un reporte donde afirma: “El Partido Comunista de China (PCC) es la principal amenaza de nuestros tiempos, poniendo en riesgo la estabilidad mundial para servir a sus propias ambiciones hegemónicas. A pesar de los esfuerzos por defender sus acciones malignas, la República Popular de China (RPC) bajo el control del PCC no es un modelo ciudadano mundial. Dominada por el secretario general Xi Jinping, el PCC está expandiendo su poder e influencia a expensas de otros”.

La amenaza de invasión militar a Taiwán, con la detonación de una guerra en Asia, es una constante en la actividad de la RPC, a pesar de la autodeterminación clara de los taiwaneses, la RPC explícitamente exige que se reconozca como parte territorial, tras la política llamada “Una China”, obligando a países con los que mantiene relaciones comerciales a que desconozcan a Taiwán, al tiempo que excluye a Taiwán y a su población del reconocimiento diplomático, político y comercial.

Los comunistas lograron, el 25 de octubre de 1971, que la ONU emitirá una declaración para admitirlos en la organización, con lo que obtuvieron el reconocimiento y, a la vez, la exclusión de Taiwán, llamado oficialmente República de China (ROC).

Dicha Resolución, nombrada la 2758 de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU), resuelve varios temas, pero nunca le da derechos a la RPC sobre la ROC, a pesar de la injusticia que comete con Taiwán al reconocer a los representantes del gobierno de la República Popular China (RPC) como los únicos representantes legítimos de China en la ONU y Expulsar a los representantes del gobierno de Taiwán de la organización.

En esta resolución, explícitamente se menciona a los “representantes de Chang Kai Shek” a quienes excluye de la ONU, nunca menciona a la ROC, por lo que la exclusión de la ROC de la ONU no tiene ningún fundamento, ni su incorporación a cualquier organismo internacional, regional o su reconocimiento diplomático, los argumentos de la RPC son falsos, y aun así coacciona al resto del mundo para hostigar a Taiwán.

Aunque así lo quieran interpretar los comunistas, esta resolución no aborda directamente el estatus político de Taiwán ni lo declara como parte de la RPC, ya que no menciona a Taiwán específicamente, no le otorga a la RPC autoridad para representar a Taiwán dentro del sistema de la ONU tampoco establece una postura oficial sobre la independencia de Taiwán ni sobre su relación política con la RPC.

Así que la ONU dejó la situación de una manera indefinida y muy difícil para la nación taiwanesa. Desde entonces, la participación de Taiwán en la ONU y en otras organizaciones internacionales ha sido bloqueada. La RPC considera a Taiwán como una provincia rebelde y promueve su “principio de una sola China”, que afirma que hay una sola China y que Taiwán forma parte de ella.

Por otro lado, Taiwán se considera a sí misma como la República de China (ROC), un estado soberano con su propio gobierno democráticamente elegido, constitución y sistema político

La ONU no ha reconocido a Taiwán como un país independiente ni ha tomado una decisión formal sobre su estatus político. La cuestión sigue siendo un tema de controversia internacional, influenciada por las relaciones entre la RPC, Taiwán ROC y la comunidad global. La exclusión de Taiwán de la ONU se basa más en consideraciones políticas y diplomáticas que en una resolución específica que determine su estatus como nación.

El régimen chino no solamente viola los derechos de sus ciudadanos, sino que en la esfera internacional viola las normas del comercio mundial, utiliza mano de obra esclava, extorsiona a compañías y países, roba la propiedad intelectual para utilizarla a su beneficio en el mercado internacional. Además, el régimen chino tiene una red de espionaje internacional con el objetivo de utilizar inteligencia para lograr sus fines hegemónicos de control político y militar, infiltrando universidades, centros de pensamiento, gobiernos, cancillerías y actores de influencia en el mundo libre, para afincar su ideología totalitaria. Con los países afines a su visión estatista, ha ido desarrollando alianzas estratégicas: Rusia, Irán, Cuba, Venezuela, entre otros, con el objetivo común de destruir las sociedades libres, y consolidar una élite global que responda a sus intereses imperialistas.

En diciembre del 2024, el Centro de Estudios Estratégicos Internacionales (CSIS) publicó un estudio sobre el espionaje del régimen chino desde Cuba, alertando sobre las implicaciones que esto supone a la seguridad nacional de Estados Unidos. En el informe se afirma que en los últimos años la presencia de China en Cuba se ha incrementado, y las instalaciones de espionaje hacia Estados Unidos se han remodelado considerablemente. Teniendo en cuenta la situación precaria de la economía en Cuba, este mayor acercamiento de Cuba hacia China, debe ser motivo de precaución. Una investigación periodística del Wall Street Journal en septiembre del 2023 se refirió al hecho de que el gobierno de Estados Unidos había identificado a técnicos chinos entrando y saliendo al menos de cuatro instalaciones utilizadas para el espionaje. De acuerdo a la información del gobierno estadounidense, se sospecha de la existencia de una docena de instalaciones similares, aunque las señales del uso de SIGINT se han identificado en estas cuatro instalaciones, tres de ellas ubicadas en las inmediaciones de La Habana (Bejucal, Wajay y Calabazar) en el occidente de la Isla, y a menos de 100 millas del sur de la Florida, y una cuarta ubicada al este de la Ciudad de Santiago de Cuba, cerca del barrio El Salao.

Esta no es la primera vez que Cuba utiliza su territorio para instalar bases de espionaje. Durante la guerra fría la Base de Lourdes proporcionaba más del 70% de la inteligencia militar a la Unión Soviética. Y al caer la URSS, Cuba comenzó a buscar un acercamiento con China, y ya en el verano de 1999, después de la visita del entonces ministro de Defensa chino, reportes periodísticos aseguraron que China había instalado en Cuba dos bases de comunicación. Las relaciones entre los regímenes de China y Cuba se han estrechado cada vez más. La Habana, a cambio de recursos, ha puesto a la disposición de China la estratégica posición geográfica de la Isla. Entre el 2000 y el 2023, el régimen chino ha entregado $7.78 mil millones de dólares a Cuba en 124 proyectos que públicamente denominan en los sectores de Comunicaciones, agricultura y energía. “En conjunto, la creciente influencia económica y política de China en Cuba podría estar abriendo puertas para sus servicios militares y de inteligencia allí. Pekín tiene claros intereses estratégicos en establecerse en la isla, dada su proximidad a Estados Unidos y su posición estratégica en el corazón del Caribe. La urgente necesidad de apoyo de Cuba representa una oportunidad ideal para que China establezca su presencia allí. Incluso sin una presencia sustancial de fuerzas de la República Popular China en la isla, la inteligencia cubana podría compartir fácilmente la información que recopile con Pekín. Dicha cooperación podría darse sin un despliegue considerable de personal chino, lo que dificultaría la detección”, afirma el informe del CSIS).

En septiembre del 2024, el ministro de Relaciones Exteriores del régimen cubano, Bruno Rodríguez Parrilla en una entrevista con Newsweek negó que en Cuba existan instalaciones de espionaje contra Estados Unidos, sin embargo, información de inteligencia e investigaciones realizadas sobre el tema indican lo contrario. Las relaciones de China con Cuba comenzaron a mejorar en 1989 luego de las protestas de la Plaza Tiannamen, pues se habían enfriado a mediados de los años 60 con la cercanía entre Cuba y la Unión Soviética. La relación de Cuba con la Unión Soviética proporcionó a La Habana conocimientos sobre guerra biológica y biotecnología. El régimen castrista comenzó a ofrecer esos conocimientos a sus homólogos en Pekín a principios del 90 y firmó un acuerdo formal para producir anticuerpos monoclonales en 2002. Esos nexos se afincaron más durante la pandemia del COVID 19. La Fundación Víctimas del Comunismo realizó una video entrevista al director ejecutivo del Centro por una Cuba Libre, John Suárez sobre las implicaciones de las relaciones de Cuba y China durante esta crisis internacional y los peligros que representa para Estados Unidos y el mundo.

El Departamento de Defensa de los Estados Unidos publicó el 22 de noviembre del 2022, un informe donde delinea el poder militar de China y el cambio de estrategia de Pekín en su camino de expansión de su influencia internacional. Un oficial que sirve de fuente en el reporte afirma que: “Otro elemento de la estrategia china es fortalecer las capacidades de disuasión estratégica del Ejército Popular de Liberación (EPL). China define este elemento de forma amplia, incluyendo capacidades nucleares, espaciales, cibernéticas, de guerra electrónica y contra espaciales, entre otras. El funcionario afirmó que Estados Unidos estima que China cuenta actualmente con más de 400 ojivas nucleares operativas en su arsenal. Si continúa este esfuerzo de modernización, China podría contar con unas 1500 ojivas para 2035”.

El ex Asesor de Seguridad Nacional dijo en un artículo de opinión publicado en The Hill en julio del 2023 afirmó: “La posibilidad de importantes instalaciones chinas en Cuba es una amenaza alarmante para Estados Unidos. Tras la crisis de los misiles cubanos de 1962, Washington se basó en un “entendimiento implícito” (en palabras de Henry Kissinger) con Moscú para reducir las amenazas provenientes de Cuba. Bajo este entendimiento, la URSS se comprometió a no desplegar nuevas armas ofensivas ni sistemas vectores en Cuba, y Estados Unidos se comprometió a no invadir Cuba. Aunque fue sometido a duras pruebas por los esfuerzos soviéticos para construir una base de submarinos en Cienfuegos en 1970, el entendimiento se ha mantenido. Además, en 2002, Rusia cerró su base de inteligencia de Lourdes, lo que limitó considerablemente su capacidad de recopilación de información sobre Cuba. Sin embargo, entre China y Estados Unidos nunca ha existido un modus operandi similar. Pekín no asumió ningún compromiso comparable al de Moscú. Además, el ‘entrenamiento militar’ en Cuba bien podría camuflar armas ofensivas, sistemas vectores u otras capacidades amenazantes.”

Cuba, por su cercanía a los Estados Unidos constituye un punto estratégico para el régimen chino, pero existen otras alianzas de China a nivel internacional muy peligrosas para Occidente, como la alianza con Irán. En julio del 2024, en Pekín se firmó un acuerdo de unidad entre el grupo terrorista Hamás, el Partido Al Fatah y otras diez organizaciones palestinas; tres meses después en octubre sucedieron los ataques contra Israel desatando nuevamente un conflicto que aún desestabiliza el Medio Oriente. Pekín es el principal socio comercial de Irán, y en mayo del 2024, cuando Irán lanzó un ataque contra Israel, el canciller chino afirmó el derecho de autodefensa de Teherán en declaraciones dirigidas al canciller iraní. Irán se convirtió en el 2023 en miembro de la Organización para la Cooperación de Shanghái (OCS) -‘la OTAN china'- y se unió en el 2024 a los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), inclusión promovida por Pekín.

A MODO DE CONCLUSION

El régimen chino, y su órgano rector, el Partido Comunista Chino, constituyen en este momento el enemigo número uno de la libertad en Occidente. Debemos apoyar al pueblo chino en su lucha por sus derechos y su libertad. Mientras las corporaciones y gobiernos del mundo libre sigan engrosando las cuentas bancarias del régimen de Xi Jinping, estaremos dándole oxígeno a un monstruo para que continúe destruyendo su propio pueblo, y se aliste para lanzar su estocada final contra la libertad de nuestros pueblos con sus cómplices en la región.

Comisión Mexicana de Derechos Humanos A.C.