La Comisión Mexicana de Derechos Humanos, a través de su Presidente, René Bolio, advirtió sobre las consecuencias y los peligros de la militarización de la Guardia Nacional: Sería inconstitucional ya que en la Carta Magna de los Estados Unidos Mexicanos, está claro que debe ser un mando civil a cargo de especialistas en temas de seguridad interior y no de militares. Con esto, se abriría el paso a más violaciones de derechos humanos de los mexicanos, hostigamientos, represión y la firme amenaza a la democracia de nuestro país.
La situación de violencia en nuestro país no ha cambiado desde la aparición de la Guardia Nacional hace 3 años, al contrario, se ha ido incrementando gradualmente con el paso de los años, aunado a la pésima estrategia de seguridad del actual gobierno, lo que también significaría que el Ejército Mexicano se encargara de perseguir ciudadanos lo merezcan o no, sin estar capacitados en materia de justicia, derechos humanos y técnicas policiales. La Seguridad Nacional (a cargo del Ejército) es radicalmente diferente de la Seguridad Pública (a cargo de las policías), su mezcla no funciona en democracia.
La militarización de la policía en cualquier país del mundo es un camino hacia el control extremo de la población, opacidad de recursos y un camino hacia la dictadura, la CMDH denuncia y lamenta que se continúe concentrando el poder y que los diferentes actores del gobierno como diputados, senadores, gobernadores e institutos que debieran ser autónomos como la propia Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y que, contrariamente, están al servicio del poder y no de los derechos de los mexicanos continúen siendo serviles, ilegales e incongruentes, siendo que anteriormente era un bandera de lucha la no militarización del país. Los Derechos Humanos continúan en un gran peligro si esta medida se concreta.